Este fue sin duda el día más duro. No sólo teníamos que subir hasta Machu Picchu, si no hacerlo antes de las 6am y llegar entre los 400 primeros para acceder a la parte más alta y con las mejores vistas, Wayna Picchu.
Por motivos de seguridad y por la conservación de las ruinas sólo los 400 más rápidos pueden acceder a esta parte, pero el reto tiene truco. El puente de acceso a Machu Picchu se abre a las 5am y los autobuses llegan a las 6am arriba. Osease, si eres un motivao y quieres hacerlo a pie -como nosotros- tienes que estar a las 5am en puntísimo en el puente y llegar arriba en menos de una hora. Suena fácil, pero para nada lo es!!
Lamentablemente (o no!) no tenemos fotos del ascenso de las escaleras incas que unían Aguascalientes con Machu Picchu en parte porque era de noche, en parte porque estabamos demasiado preocupados en tardar menos de una hora en llegar sin vomitar. Bueno, eso creo que solo era yo...
Realmente levantarte a las 4am y a las 5am estar subiendo escaleras como una descosida a oscuras sin desayunar y con prisas no es un planazo. A mi, como se puede intuir en la foto superior, se me hizo muy duro. Es un gran esfuerzo físico -al menos para mi- y a esas horas y con el efecto altura... Bueno, hubo gente que se rindiño, otra que acabó vomitando, gente que se marea por la altura... Yo creí que vomitaría, pero al final no sé cómo vas sacando fuerzas de flaqueza y por fín llegas a la oficina de entrada donde el resto de motivados del día de hoy esperan en cola.
Pero a pesar del dolor de to, qué alegría cuando te enteras que hemos llegado antes del 1º bus de vacas gordas y podremos entrar a Wayna Picchu!!! YEHAAAAAA!!!
Las vistas de Machu Picchu amaneciendo y en compañia de las golondrinas que anidan entre las famosas piedras hicieron que recuperaramos el aliento y valiera la pena el dolor de rodillas.
Y para subir a Wayna Picchu una hora más de escaleras. Qué afortunados!! (Yo me muero si lo tengo que volver a hacer!)
Los incas no paraban de construir escaleras por todos lados. Y siemrpe estrechas y altas... bien incomodas! Eran muy artistas pero que bien les habría ido inventando el ascensor.
Escaleras en túnel.
Escaleras al exterior.
Y subiendo a Wayna Picchu unas preciosas vistas de toda la ciudadella de Machu Picchu. Tan bonitas, que algunos daban saltos de alegría. Yo no sé de donde sacaba la energía...
Y por fín desde lo más alto de Wayna Picchu las mejores vistas inigualables del paraíso inca.
Qué pena que todo paraíso lleve consigo obligatoriamente unos 50 guiris. Que difícil era hacer fotos en las que pareciera que estabas solo...
Pero finalemnte disfrutadas, fotografiadas y grabadas todas las vistas desde WaynaPicchu tocaba bajar a conocer Machu Picchu desde abajo.
Increible ubicación de una ciudad. Debía molar despertarse cada mañana rodeado de cerros inhabitados y golondrinas muertas de frío.
Y como no! Espectaculares edificaciones que después de miles de años aún se aguantan de pie y con estilo!
Foto obligatoria con vistas a la ciudad sagrada de Machu Picchu y al fondo, Wayna Picchu.
Y una vez paseado todo nos tocaba bajar y como no, lo hicimos a pie. La desmotivación llegó en el 5º escalón cuando empezamos a prometer que una vez y no más. Yo esto no lo repito!!!
Y al llegar abajo aún teníamos el paseito de 4 horas hasta Sta. Teresa. Pero esta vez el paseito no fue andando, nooooooooooooooooooo!!!! Nuestra salud estaba peor que nuestra economía.